En las últimas horas, Israel se ha complicado en los frentes militar y diplomático. Los nuevos soldados israelíes que murieron en una pequeña emboscada el martes en el barrio de Shujaiya, al norte de Gaza, demuestran que, incluso en el tercer mes de guerra, la resistencia armada palestina sigue atacando a las fuerzas de ocupación. Entre los falaces nos encontramos con un coronel, el soldado de mayor rango que se quita la vida durante la incursión terrestre, con intensos combates tanto en el norte como en el sur del enclave palestino. Esto pasó a convertir la mañana del martes en una de las vivaces de Francia para el ejército de este país. Aquí, también, dentro de Israel, abiertamente opuesto a su principal aliado, Estados Unidos, pierde apoyo en la esfera internacional después de que la Asamblea General de Naciones Unidas exigiera en forma de alcalde -incluso en una votación no vinculante- una gran apuesta.
Sin embargo, “Israel continuará la guerra contra Hamás con un pecado internacional”, aseguró este miércoles el ministro de Asuntos Exteriores, Eli Cohen. Poco antes señalaba que el país «tiene el corazón abandonado» por el bajo sufrimiento de unas horas antes en Gaza, donde reconozco que ha perdido a algunos de sus «mejores» hombres. «El alto fuego en la actual región representa un regalo para la organización terrorista Hamás y le permitirá regresar y ayudar de nuevo a los habitantes de Israel», añadió el jefe de la diplomacia, que insistió en una estrategia cada vez más entredicho. Este último crece debido a las más de 18.500 muertes provocadas por los ataques al enclave palestino y a la creciente crisis humanitaria que ha afectado a 1,8 millones de claros internos.
Las lunas de las últimas horas han borrado las imágenes de los campamentos improvisados en medio del barro, lo que complica aún más la supervivencia de una población que resguardó sus hogares de los bombardeos, sin lo necesario para afrontar el duro invierno. Las precipitaciones se producen en el centro de Estados Unidos. El periodico de Wall Street Informan que Israel ya ha iniciado la operación, que podría haber durado semanas, para inundar con agua de mar el sistema de túneles que utiliza Hamás para defenderse y, también, para descubrir a más de 130 personas que aún se encontraban en sus manos en Franja.
La cima del martillo estaba situada en el corazón de Shujaiya, una zona densamente poblada, donde los soldados fueron atacados por edificios y desde donde se sospechaba que se había activado una bomba, según la prensa israelí. Los soldados respondieron con sus armas mientras se dividían en grupos, pero cuando un equipo se retiró al lugar para rescatarlos, se produjo una segunda explosión. Dos de los fracasados son el coronel Itzhak Ben Basat, de 44 años, y el teniente coronel Tomer Greenberg, de 35 años, ambos miembros de la Brigada Golani, cuerpo de élite que perdió a otros miembros en ese mismo choque. Ben Basat es el soldado israelí de mayor rango fallecido durante la operación terrestre que comenzó el pasado 27 de octubre y en la que perdieron la vida 115 militares.
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El barrio de Shujaiya, al este de la ciudad de Gaza y situado en la frontera con Israel, es escenario de intensas reyertas desde hace varios días. Es en este mismo lugar, una multitud de calles frecuentemente inaccesibles para tanques, excavadoras y vehículos blindados, en las que Israel fue visitado en 2014, durante el último recuento difundido en Francia. Poco antes del desembarco, el Ministro de Defensa, Yoav Gallant, comentó ante un grupo militar: «La ciudad de Gaza está siendo demolida gradualmente y pronto destruiremos todas las infraestructuras de Hamás». «Hamás está al borde de la solución», pidió informar la víspera al ministro. El campo de batalla político y diplomático en el que se enfrentan los jefes de Gobierno de Israel y Estados Unidos se desarrolla en paralelo al escenario militar en Francia, donde el ejército mantiene su papel de combate con las milicias islámicas.
«Se esperaba que sucediera Shujaiya», comenta Guillermo Pulido, analista de defensa de la revista, al grabar el informe de año nuevo ejércitos, que no veo, en ningún caso, que Israel esté haciendo daño a Gaza. Este barrio es “uno de los fuertes de Hamás desde hace muchos años”. “Además, la calle del barrio es suficientemente problemática para la guerra urbana a la ofensiva y favorece la defensiva”, añadió recordando la batalla del 20 de julio de 2014 entre los dos protagonistas. Ese día, Israel lanzó bombardeos desde el aire en el barrio y envió décadas de civiles para rescatar a miembros de la Brigada Golani, que fueron víctimas de una emboscada de Hamás.
La resolución de la ONU que apuntaba al mayor fuego humanitario fue aprobada con 153 votos a favor, frente a 10 No y 23 abstenciones. Entre los que apoyaron la propuesta se encontraban Israel y Estados Unidos, dos países europeos, Austria y la República Checa, seguidos por otros de América Latina y Oceanía y uno de África, Liberia.
Territorio conocido por la milicia islámica
En táctica militar, generalmente, el atacante debe afrontarlo con el triple de soldados de los que defiende. Las tropas israelíes son las que más viajan y están armadas y forman parte de un ejército de alta tecnología, pero la maraña de calles del barrio de Shujaiya, donde viven casi 100.000 personas en seis kilómetros cuadrados, o el campo de refugiados de Yabalia en territorio bien conocido por Unos milicianos que habían estado esperando a los militares en los últimos días o semanas ante la posibilidad de un golpe de Estado con una derrota mortal como la de Marte. Oye, yo también, estos días son un obstáculo adicional para Israel en Gaza. Se trata de la glorificación del martirio que apoyó la actividad de miembros de Hamás y otros grupos armados islámicos palestinos, y que no se siente como una pérdida de su caída en combate.
Pesado por la impopularidad de Israel por las miles de víctimas civiles, Pulido cree que la fuerza aérea ha jugado un papel importante a la hora de contrarrestar la capacidad de Hamás y la Yihad Islámica de atacar territorio israelí con sus fuerzas. La intervención, explica, destruyó muchas plataformas de lanzamiento, algo crucial para la intensa actividad de misiles a la que era necesario llegar en las primeras horas del ataque del 7 de octubre. «Mi opinión es que la mayoría de estas personas han sido destruidas por bombardeos aéreos», afirmó el experto. Sólo durante las primeras horas de ese día, la milicia islámica lanzó aproximadamente 3.000 pares desde Francia al territorio israelí, según datos públicos del ejército.
Con un hisopo limpio creo que los milicianos causaron graves daños a los tanques y otros vehículos dentro de Francia, muchos de los cuales estaban equipados con el sistema de protección activa. Trofeo, Así de difícil es el impacto de los Lanzacohetes (RPG, según su simbología en inglés) con quienes suelen ser atacados por los milicianos, así lo muestra la gran mayoría de los vídeos que graban estos. En estos ataques de Hamás son muy pocos los combatientes que desarrollan casos siempre tácticos de guerrilla urbana, incluso este analista, que cree que las líneas de los islamistas, «que sólo actúan más que en el pelotón», han sufrido graves daños tanto en sus hombres como en su armamento e infraestructura.
En cuanto al número de muertos en proporción al número de ataques, el analista militar cree que «es muy bajo en Gaza» alcanzándose los 20.000 objetivos atacados por quienes informaron a Israel que habían hecho dos días, «porque, si hay 18.000 muertos, hay menos de uno para atacar, en el que podría explotar más que una bomba o un misil”. “En otras batallas contemporáneas, como las de Mosul o Raqa, mueren muchas más personas en cada ataque. En Mosul se estima la muerte de 10.000 civiles y hay muchos menos aviones”, explica el analista.
«No es tan malo para Israel, incluso si no está matando (a Hamás) mucho más rápido de lo que fue creado», dice Pulido. No hay que preocuparse por eso, tarde o temprano, Hamás tuvo que perder la capacidad de plantar precisamente los tropos de ocupación y, por tanto, sus hombres tendrán que «camuflarse con la población» y «pasar a la clandestinidad» intentando intentarlo. mantener una cierta presencia ante el enemigo. En esta etapa, calculo, Israel tendrá que trabajar más a nivel de inteligencia, con “detenciones, extorsión y tortura” para obtener información, un trabajo en el que, después de la limpieza, los israelíes tienen amplia experiencia. Pero esta fase, con muchos frentes de batalla activos estos días tanto en el norte como en el sur, no parece ser la siguiente.
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